No lo pudimos resistir....Tantos días sin subir y el cuerpo pide marcha. Después de algunos entrenos de rocódromo, la cabra tira al monte. Siendo la predicción no muy buena, sabíamos que el día no sería espectacular pero la cosa era pisar un poco de nieve. Ascender al pico Abedular desde el puerto de Tarna son apenas 400 metros de desnivel en poco más de una hora. Una ruta express pero no por ello menos interesante. Durante la ascensión fue preciso ponerse los crampones pues sobre la arista-loma quedan al descubierto nieve muy dura, efecto del viento, aunque en la parte inferior hay nieve fresca del día anterior. Además alternamos algunos tramos de fuerte pendiente, para "entrenar" con los crampos. La llegada a la cumbre es hoy nada espectacular, brisa y niebla. Hoy no será un día para panorámicas, a pesar que desde aquí en días despejados puede quedarse uno ensimismado viendo el fastuoso panorama que esta montaña nos brinda. No en vano tenían aquí trincheras durante la guerra civil. El descenso por el mismo sitio. Empieza a nevar....como mola. Nieve fresca pues no hay tanto frío, a ver si va cubriendo más y más.
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