ENGOLAOS: CIRCO DE GAVARNIE

Días anteriores habíamos visto el Circo de Gavarnie (Hautes Pyrénnées) desde abajo, el pueblo a 1360m. Vamos a realizar un trekking de 12h pero por la parte superior del Circo y partiendo del Col des Tentes (2200m) que es accesible por carretera en esta época del año. Salimos muy temprano, muy temprano. Por el camino amanece dorando las montañas que custodian el refugio de Sarradets (2560m) que rebasamos no sin dificultades: poco antes hemos tenido que franquear el curso helado y algo peligroso de un torrente. Atravesamos un nevero, nieve dura pero con huella muy marcada. Llegamos a la Brecha de Rolando, no hay mucha gente pero por la tarde será otra cosa. Las vistas hacia España son extensas. Giramos al O. (izquierda) en busca del Paso de los Sarrios, un trecho equipado con una cadena que pasamos sin titubear, pues no presenta ninguna dificultad. Desde aquí vamos ascendiendo entre gradas y neveros que hacen lenta la progresión. Vamos dejando atrás los picos de el Casco (3006m) y La Torre (3009m). Alcanzamos así el Col de la Cascada (2900m), vistas impresionantes sobre el valle de Gavarnie. Proseguimos para dar vista al Pic de Marboré (3248m) y a lo lejos distinguimos el Monte Perdido (3355m), al que habrá que planear su ascensión en un futuro no muy lejano. Momentos de relax para contemplar las montañas de la vertiente española y tirar un poco de mapa. Regresamos. La vuelta nos depara un momento agrio: un infartado en el camino y han avisado para su rescate. Pronto vemos al helicóptero de la Guardia Civil que diligentemente izan al desafortunado montañero. Contemplamos toda la maniobra, prudentemente distantes. Va por ellos este reconocimiento, por la excelente labor que vienen haciendo y que ha supuesto recientemente la muerte de tres de ellos en el Mampodre, en nuestras montañas, tras un fatal accidente del helicóptero que tripulaban. Descenso por el duro nevero, ahora en sombra, eso sí con crampones. Parada en el refugio para descansar, hay mucha gente y no tardamos en irnos. Vamos disfrutando del camino y aprovechamos cuanto podemos el sol tardío que calienta de lo lindo. Esto terminará con una buena cena a base de couscous en la furgo y un merecido descanso. Mañana a escalar y a estirar.